Aprende a disculparte para ser un buen líder
Reconocer los errores refuerza las dotes de liderazgo y la confianza del equipo de empleados

text.compare.empty.header
label.searchBox.help2
Reconocer los errores refuerza las dotes de liderazgo y la confianza del equipo de empleados
Está claro que todos nos equivocamos, pero ¿qué pasa si el que se equivoca es un líder y su reconocimiento de culpa tiene más peso en la organización?
¿Saber disculparse debilita nuestra capacidad de liderazgo? ¿Es beneficioso para un líder reconocer sus errores delante de sus empleados?
Todo lo contrario, un profesional ejercerá mejor sus dotes de mando si sabe disculparse de forma efectiva, además que conseguirá crear unas relaciones de trabajo más sanas y efectivas.
La cosa también está en saber decir algo más que “lo siento” y por ello, debemos de recordar estos detalles, al admitir nuestros errores:
Disculparse y continuar poniendo excusas o no estar dispuesto a hacer ningún cambio invalida por completo la voluntad de arrepentimiento.
Una disculpa implica reconocer que somos dueños de nuestras acciones, conscientes de las repercusiones y que estamos dispuestos a buscar soluciones.
Por tanto, elimina cualquier “pero”, aunque esto no implica que no puedas defender los motivos por los que actuaste de tal manera.
Una de las razones por las que cuesta tanto disculparse es porque nos expone ante los demás y dejamos claros nuestros defectos. Algunos ven esta situación como una amenaza para su confianza y seguridad y por ello no son propensos a pedir perdón.
Pero es tan sencillo como pensar que, si debemos compartir nuestras fortalezas para trabajar en equipo y conseguir los objetivos de la empresa, también compartiremos nuestras debilidades y no queda más remedio que aceptarlas y reconocerlas.
Una disculpa efectiva va acompañada de una solución y de una propuesta para arreglar las cosas.
Si el daño es irreparable, tampoco debemos castigarnos por lo ocurrido, pero sí trabajar en otros aspectos que mitiguen el error. Es adecuado que la disculpa se complete con la oportunidad de reconstruir la confianza profesional, mejorar la comunicación o probar métodos de trabajo que sean más efectivos para todos.
No se puede corregir el pasado, pero sí cambiar el futuro.
Saber disculparse supone trabajar la confianza en nosotros mismos y también confiar en los profesionales que nos rodean.
Tras cometer un error o causar un conflicto, hay que trabajar más en la confianza que el resto deposita en nosotros, por lo que lo mejor es comenzar con una actitud abierta, franca y sincera.
Saber pedir perdón es un acto de crecimiento personal y también de autoaceptación.
Si confías en que el resto te acepte con tus errores, también deberás aceptarte a ti mismo.
Por tanto, comienza por aprender a perdonarte a ti mismo y a que realizar ese acto, no solo es por los demás, sino también para tu propio beneficio y tranquilidad.
¿No tienes claro qué carrera quieres estudiar? Estas son los 10 estudios mejor remunerados según el Instituto Mexicano para la Competitividad.
Decide tu futuro con el Portal de Profesiones de Universia